Marcha Abismal de Ternlot Igíran

Durante las últimas etapas de la Cabalgata del Fin se dio la infame Marcha Abismal, la cual comenzó justo después de la Primavera Negra, o sea 229 días después del alzamiento del Sol Ennegrecido. Esta comenzó exactamente el 3 de Vitserhunt en Nulvín, dos días luego del solsticio de verano. Hombres y mujeres vieron la luz del sol por primera vez en un largo tiempo, causando celebraciones y felicidad en todos los reinos de la región nulvina. No obstante, aquel júbilo pronto sería devastado por una funesta noticia: la llegada de ejércitos de otro mundo marchando por las verdosas praderas nulvinas.   La Marcha Abismal fue un conflicto bélico entre los Generales Abismales y sus Legiones contra los Reinos Nulvinos. Por supuesto, este conflicto se desarrolló de otras maneras en los demás continentes y regiones de Terenar, pero el artículo a continuación solo elaborará en los detalles sobre los sucesos en Nulvín (el actual Sacro Imperio Enamés) y, de manera más específica, los eventos en la Mancomunidad Evnídeo-isnudesa.  

Antecedentes

Antes de la Toma de Isnúd y Evníd, el reino vivió la Primavera Negra, un periodo de 229 días en el que la luz del sol apenas tocó el planeta y gran parte de la vegetación murió, llevándose con ella una abrumadura cantidad de animales y otros organismos que dependen de los productores primarios fotosintéticos. Extinción masiva de diversas especies y una hecatombe mayor que la Maldición de Eneter registrada en las viejas crónicas nulvinas, los reinos de Enrúv e Isnúd estaban completamente expuestos a cualquier invasor.  

Llegada del Cuarto Cuerpo de Ejército Obsio

Un portal del Abismo es abierto en Terenar durante el periodo de la Primavera Negra, el cual trajo a los territorios de Evníd-Isnúd al Cuarto Cuerpo de Ejército Obsio, conformado por dos divisiones. Tanto la División I como la División II estaban compuestas, cada una, de dos brigadas de infantería, una de caballería y otra de artillería de campaña. El Cuarto Cuerpo estaba formado de al menos 18,000 soldados. Estos hombres estaban armados con fusiles de avancarga similares al fusil Idsel enruvés en potencia, manejo y velocidad.  

La Primera Marcha de Ternlot

La Primera Marcha de Ternlot hace referencia a los ocho días que los ejércitos abismales del General se desplazaron por los territorios del Reino de Isnúd hasta la capital. Durante este proceso, diversos señoríos, aldeas y ciudades pequeñas fueron atacadas, asediadas y ocupadas. En aquellos lugares donde las criaturas del Amo llegaban, Ternlot establecía dos opciones para los líderes: arrodillarse ante él y aceptar la fe al Amo o la muerte. Aquellos líderes que se rechazaban a aceptar a Ternlot eran fusilados públicamente. Aquellos que no, Ternlot aceptaba como parte del nuevo régimen. Independiente de la opción, la pequeña aldea o señorío quedaba ocupado por un pequeño número de tropas, el suficiente para mantener el lugar en orden. Fuera de la supervisión de Ternlot, muchos soldados abismales cometieron frecuentes crímenes de guerra mientras que exploraban sus cuerpos materiales: asesinatos, torturas y abusos de toda índole indiferentes a la edad, la raza, la clase social y el género.  

Masacre de Aivhid

Un mórbido capítulo de la Marcha de Ternlot se dio en la Masacre de Aivhid. Aivhid fue un pequeño pueblo ubicado a aproximadamente 100 kilómetros al oeste de Isnúd, el cual se dedicaba predominantemente a la actividad agrícola y ganadera. La población de Aivhid, menor a 150 habitantes, fue diezmada por completo (obviamente no antes de torturarla y abusar de esta de maneras indescriptibles) tan solo un día luego de que Ternlot dejara a un grupo de soldados vigilando el lugar e irse a marchar hacia Isnúd. Una vez Ternlot recibió noticia de lo ocurrido, el mismo General Abismal pidió el desuello público de los soldados responsables, acabando con 50 de sus propios hombres frente al restro de su regimiento. Según contaron los soldados, Ternlot se levantó en primera fila para ver personalmente cómo les arrancaban la piel mientras aún estaban vivos sin que un cambio se diese en sus gestos; siempre con una mirada fría y apática.  

"Aquellos soldados no tenían ni la más mínima idea. Los 50 hombres, luego de purgar por completo Aivhid, regresaron por su cuenta con el resto del ejército, creyendo que traían una buena noticia para Nuestro General. Ternlot no mostró ningún tipo de emoción al oír lo que ocurrió. Durante la noche, mientras el ejército descansaba, Ternlot ordenó a un grupo de soldados que los triplicaba a capturarlos en tanto dormían. Estos hombres fueron maniatados y reunidos en el centro del campamento, donde todo el Cuerpo fue llamado para ver lo que ocurriría con aquellos que osaran desobedecerlo. Fue la primera vez que oímos a alguien desgañitar con tanta intensidad. Los ensordecedores gritos y llantos fueron traumantes para algunos, irrelevantes para otros, y excitantes para una minoría. Lo cierto es que si un nulvino hubiese sido forzado a ver lo que ocurrió esa noche, bajo la tenue luz de las antorchas, nunca más hubiera podido dormir. El hedor a heces, orina, sangre y órganos quedó por siempre impregnado en mi memoria en aquel instante, y fue ahí cuando me di cuenta de la fragilidad de nuestros cuerpos".

-Comentarios de un soldado del IV Cuerpo en su diario retrospectivo de la conquista de la Mancomunidad Evnídeo-isnudesa.

 

Asedio de Isnúd

El Asedio de Isnúd se dio entre el 11 de Vitserhunt y el 16 de Austerhunt del 1 e.M. Fue el primer conflicto directo entre el Cuarto Cuerpo de Ejército y las tropas de Evníd-Isnúd. Aunque la ciudad de Isnúd contó con la ventaja de sus poderosos bastiones, Ternlot Igíran logró el acceso rápido a través de una estratagema de guerra que llevó a que el asedio no durara más de tres meses.  

Asedio de Evníd

Este asedio duró desde el 49 de Austerhunt hasta el 47 de Grotsnerhunt del 1 e.M. Fue el último conflicto mayor entre el Cuarto Cuerpo de Ejército Obsio y las tropas de Evníd-Isnúd. Una vez Evníd fue capturada por Ternlot, las demás ciudades comenzaron a rendirse, incluyendo a Oifsíd, y estas fueron fácilmente anexadas. Durante este asedio, Ternlot dependió de los mismos habitantes de la ciudad para comenzar una insurrección y que fuese más fácil la entrada de sus tropas hacia la ciudad.  

El gobierno provisional de Agmon

Mientras Ternlot marchaba y asediaba Evníd, este decidió que su oficial Agmon quedara a cargo de Isnúd. La antigua Constitución de la ciudad (basada predominantemente en la Constitución del Reino de Enrúv y en los documentos liberalistas sobre el derecho natural y el contrato social redactados pocos años antes del comienzo del Dragena) fue quemada públicamente junto con todos aquellos servidores estatales que se negaron a aceptar el nuevo Régimen Abismal. Estos fueron vendados, maniatados y arrodillados en los cadalsos públicos, para luego ser fusilados desde atrás con un tiro limpio directo hacia sus cabezas. Una purga de sacerdotes eratoristas también se dio por toda la ciudad, y las antiguas iglesias de La Luz fueron profanadas y transformadas en lugares de adoración al Amo.   Todos los documentos eratoristas que se descubrieron fueron añicados e incinerados públicamente. Miembros del pueblo llano que se oponían a las nuevas autoridades eran ejecutados junto al resto y sus familias torturadas, violadas y asesinadas. Un ferviente temor creció en el resto de las casas y aquellos que mostraban interés en rebelarse igualmente eran reprimidos por sus propios parientes. En consecuencia, la ciudad entró en una fase de indefensión aprendida y de sumisión. Las nuevas autoridades tuvieron un trabajo más fácil en mantener el orden y el control provisional de Agmon bajo las órdenes de Ternlot prevaleció.