Huoyán

La ciudad de Huoyán, capital y corazón del clan Tori, emerge majestuosa ante los ojos de quienes la contemplan. Situada en un terreno llano y fértil, se extiende sobre vastas extensiones, con enormes construcciones que se alzan hacia el cielo como testimonios de la grandeza y prosperidad del clan.   Se encuentra escondida en un valle de Kiyohara resguardado por enormes montañas cuyos deshielos producen largos ríos que alimentan a la ciudad y la biodiversidad de la zona. Cruzar las montañas para llegar es una tarea difícil que muchas veces solo se pueden permitir los mismos cegadores con sus aves adiestradas.   Las calles de Huoyán están meticulosamente diseñadas, amplias y ordenadas, flanqueadas por edificios ostentosos que combinan la elegancia con la funcionalidad. Los techos de tejas rojas se elevan en ángulos pronunciados, mientras que los aleros adornados con detalles tallados en madera añaden un toque de belleza y sofisticación a cada estructura.   Los jardines de Huoyán son otro aspecto destacado de la ciudad, llenos de exuberantes vegetaciones y coloridas flores que crean un oasis de serenidad en medio del bullicio de la vida urbana. Los estanques de loto se encuentran dispersos por toda la ciudad, reflejando la belleza del cielo y ofreciendo lugares de relajación a sus residentes.   En cada esquina se pueden encontrar tiendas y mercados repletos de productos exquisitos y delicados, desde sedas y porcelanas hasta joyas y perfumes. La vida en la ciudad es vibrante y dinámica, con festivales y celebraciones que llenan las calles de alegría y emoción en todas las épocas del año.   Sus habitantes caminan vistiendo hermosas ropas que combinan excelentemente con las calles de alta alcurnia por las que se pasean. A todas horas del día, la agitada ciudad demuestra con creces el ser la más grande de los clanes.    

Palacio de las mil grullas

  A orillas de un enorme lago cerca de la costa del golfo se encuentra el palacio, una extensión enorme que no tiene pudor en demostrar la riqueza de la familia principal con enormes jardines, altas construcciones repletas de elegante decoración y estructuras decoradas con pinturas y pilares. El palacio es tan grande como para albergar a toda la familia principal y a todos sus leales sirvientes.   Si bien la totalidad siempre pertenece al líder el palacio está dividido en sectores que le pertenecen a las personas más importantes del clan, estas incluyen varias habitaciones, sectores para los asistentes personales de su dueño, santuarios privados, jardines, bibliotecas y cualquier cosa que deseen tener. La sección más grande es la central, el nido de faisanes, en donde vive Hayato, su esposa e hijas, luego le sigue de cerca el pabellón de loto, la residencia de su hijo.