LdL1: La Fuente de la Salud

10 Crepuscular, 1842 TE.
Eldriss, en el Valle de Astrindel, Lynderfall, Imperio de Daran.   Nuestros aventureros fueron invitados al Valle de Astrindel en Lynderfall, lamentablemente en el viaje una ola colosal destruyó el barco antes de llegar a la ciudad de Eldriss, falleciendo su capitán y el resto de la tripulación en el siniestro. Una vez incorporados en la playa sorprendieron a un grupo de goblins quienes al parecer estaban enterrando explosivos en el área. Uno de ellos soltó a un elefante de carga e embistió a Gozer Deathmaker. Mientras todo ello ocurría el mar dejaba otro aventurero que venía de contrabando en el barco: Da’as Karith. Juntos en la refriega vencieron a los goblines y consiguieron calmar a la bestia y dormirla.   El camino hacia el valle fue largo, los héroes se encontraron con muchos guardias descubriendo la gran seguridad que caracteriza al valle. Una vez en Eldriss, Tarkir el Errante se dirigió, en solitario, al templo dedicado a la druida Astride, la Arbor Guía, atraído por la curiosa estatua en la entrada del templo de Crig Han. Una vez dentro consigue hablar con la suma sacerdotisa Titania Silverlance quien, incrédula de sus palabras, le pide que abandone el templo.   En la Fortaleza de la Primavera son recibidos por Aranor Dhonul , un elfo un tanto despreocupado por la ciudad quien se enfada por su presencia y se retira sin más. Es entonces que Mynadriel Dhonul entra en la sala principal para hablar con los héroes y solicitar de sus servicios: son informados sobre los inusuales comportamientos de las aguas tanto de los ríos como del mar. Ella les dice que todo debe quedar en secreto: la gente en la ciudad vive en paz y no quiere que cunda el pánico. Con dicha información deben entrevistarse nuevamente con Titania en el templo de Crig Han. Cuando llegan ella va acompañada de una joven de pelo blanco corto vestida con un hanfu, quien al escucharlos hablar, su semblante se nubla de tristeza según advierte Da'as Karith.   Luego, los aventureros se toman el tiempo de buscar una tienda donde los recibe Trallen, un humano vendedor de objetos mágicos, quien al escuchar hacia donde van se interesa por lo que dicen otorgándole gratuitamente a Da’as Karith una poción de frio. Con la posible ubicación de la fuente bajo las mazmorras abandonadas de la ciudad los aventureros emprenden su camino. En ellas encuentran que el lugar está putrefacto por las aguas colandose por las paredes creando abundante humedad. Más abajo se encuentran con otro nivel de calabozos donde la muerte es el escenario principal, cadáveres esparcidos por todo el lugar.   Una vez encontrada la fuente, una figura masculina entra detrás de los héroes a quien reconocen como Raphtael el espíritu del agua con quien se enfrascan en una batalla semi-acuática. Da’as Karith, Gozer y Tarkir ocupan el poder del hielo y logran vencerlo antes que inunde por completo la sala de la fuente.   Con la habitación totalmente seca Raphtael toma la peculiar forma de mariposa y revolotea por el lugar. Aún encerrados en la habitación, un pajarillo entra por los espacios de los barrotes y se transforma revelándose a los aventureros como la joven que acompañaba a Titania; diciéndoles por fin que ella es Sora el Skÿjin. Ella, armándose de valor, les pide encarecidamente que le ayuden a encontrar los tres espíritus restantes: Longroot, Ysel y Roxaline.   Los héroes son trasportados a traves de un portal a los Humedales de Celewën frente al Arbol Anciano donde sus heridas son completamente sanadas con la magia de Sora al pronunciar una emotiva frase «cierro mis ojos para ver, porque mi corazón se abre en los momentos más difíciles».