ACTO I: La Batalla del Alba Sombría - Parte 1 Report
General Summary
Encontrando pistas
Los héroes, tras disfrutar un concierto del coro del Orfanato de Lagozul y Cia. en una taberna, son convocados al cuartel general del Ejército de Aurelis. Allí, su comandante les informa de un ataque devastador en una pequeña aldea, situada en las Llanuras de Eldoria. Los Capitanes, libres de empatía alguna, entrevistan al pobre campesino, quien antes de desmayarse por la presión sufrida por los mismos, menciona que los atacantes gritaban: "¡Por Lolth!".
Los Capitanes bajo la órden de su comandante Rick Eyehawk, movilizan sus batallones hacia el Gran Puente de Eldoria, donde encuentran a cinco soldados bajo un encantamiento que les impide revelar información. Gracias al hechizo de deshacer encantamiento de Kar'gat, los héroes descubren la verdad: una legión de Drows cruzó el puente tras arrojar a diez soldados al río. Los registros del puente, cruciales para confirmar detalles, se han perdido cuando Wotan, los dejó caer accidentalmente al agua (Investigación DC10 - 1) ¿Qué información importante podrían contener esos papeles?
A la persecución del enemigo
Mientras tanto, Kratraklar y sus exploradores reportan actividad hostil en otros puntos: no muertos han atacado civiles en un paso hacia Eldamara. Una fuerza "brutal" amenaza en ese cruce, erradicando escuadrones enteros de los Capitanes Kratraklar y Kar'gat, quienes por suerte son asistidos con ayuda del Capitán Harry Vol O'faia y sus competentes escuadrones desde el frente sur. El Capitán les informa que Eldamara está bajo custodia de Helm y no hay más enemigos hacia el sur, sus palabras son firmes y convincentes (investigación DC10). Kar'gat informa al Capitán O'faia que el puente ha sido traspasado y los guardias encantados, por lo que el Capitán y sus tropas salen a toda velocidad hacia el norte, a proteger los distintos pueblos y a sus habitantes. Mientras tanto, nuestros capitanes marchan de vuelta hacia el puente, para reunirse con Wotan y decidir qué hacer.
Gracias a la habilidad de Kratraklar de hablar con los animales, las águilas exploradoras de Rick Eyehawk revelan que el norte sufre saqueos, una villa al este ha sido quemada, y un pequeño contingente enemigo se dirige al oeste. Por ello dejan unas cuantas tropas en el puente y deciden marchar rápidamente hasta alcanzar a Kinglun y Miyamoto san.
Musashi Miyamoto, quien identifica huellas de grandes monstruos que conducen a un profundo valle, convence junto a Kinglun al resto de los Capitanes que ese es el rastro más importante a seguir y que el resto es solo una distracción. El rastro acaba en una puerta que precede la olvidada Cueva del Ídolo de Helm. Al llegar, los héroes enfrentan a un grupo de Drows y una nigromante que acaba desfigurada gracias a las diestras habilidades de estética avanzada de Kinglun.
Mientra tanto, las águilas exploradoras guían a Kar'gat, Kratraklar y Wotan hacia la localización de Miyamoto y Kinglun.
Una vez reunidos, los capitanes deciden entrar en la cueva, la puerta parece haber sido abierta hace relativamente poco tiempo (Percepción DC5). Las tropas de lo Capitanes se quedan fuera, quemando los cadáveres de los 100 zombies y rematando a los Drows que quedaban agonizando en el área. Y aunque aun nadie entiende cómo una nigromante con un poder tan bajo y tan poca experiencia podría haber levantado y controlado 100 zombies, parece que para nuestros capitanes hay cosas más importantes en las que centrarse.
La Cueva del Ídolo de Helm
Dentro, encuentran una sala con una estatua, supuestamente identificando a Helm o a sus guardianes. Ahí dos Draegloth y un poderoso Mago Drow guardaban la sala para evitar la entrada de entrometidos. Los valerosos capitanes acaban con ambos Draegloth, mientras que el Mago Drow logra escapar haciéndose invisible tras gritar en una lengua desconocida por los héroes.
Musashi Miyamoto decide ir en busca del Mago Drow, mientras que Wotan investiga (DC15) la estatua central . A sus pies halla agua clara y transparente, posiblemente refrescante. La estatua porta un escudo en su mano izquierda con el símbolo de Helm, en su mano derecha porta una espada. En el pie de la estatua hay escrito:
Aquí yace olvidado el rey guerrero, esperando pacientemente a su verdadero heredero.
Los héroes no muestran gota de cansancio. Las desgracias sufridas y las bajas entre sus filas no son suficientes para desmotivar a los Capitanes.