Skapa-Og-Mynda

Diosa del Espacio y Reina de las Formas   Skapa-Og-Mynda es una de los Olvidados, dioses que surgieron tras los conflictos entre dragones y gigantes en la era primigenia. Estos dioses guiaron a los primeros pobladores de Tír nan Ryu en la fundación de Aurora Lux, la primera civilización. A pesar de sus enseñanzas, la decadencia de los ciudadanos llevó a la destrucción de Aurora Lux y al Ocaso de los Dioses.   Skapa-Og-Mynda es una cambiaformas, capaz de adoptar diversas apariencias que reflejan tanto su naturaleza celestial como terrenal. A menudo se la representa envuelta en un manto estrellado que refleja el vasto cosmos. Su cabello puede parecer una cascada de constelaciones, y sus ojos dos nebulosas brillantes. Su símbolo representativo es un astrolabio, una herramienta que simboliza su dominio sobre el espacio y su capacidad para guiar a los viajeros a través de las estrellas.   Skapa-Og-Mynda no es omnipotente, pero posee un poder significativo como creadora del firmamento de Gaeia. Ella catasterizó las constelaciones, creando el cielo nocturno y dotándolo de las estrellas y patrones que los mortales utilizan para navegar y encontrar inspiración. Su influencia es sutil y se manifiesta en la armonía del cielo estrellado, posteriormente priorizo los viajes seguros por el espacio. Aunque su presencia es difícil de percibir para aquellos no versados en los secretos de la antigua magia, su impacto es constante y crucial para la navegación y exploración del cosmos.   Una de las leyendas más conocidas sobre Skapa-Og-Mynda es la creación del firmamento. Se dice que ella extendió su manto estrellado sobre el mundo, colocando cada estrella y constelación en su lugar para guiar a los mortales. En tiempos de crisis, cuando los dragones y gigantes amenazaban con destruir el equilibrio del cosmos, Skapa-Og-Mynda utilizó su dominio sobre el espacio para crear barreras que contuvieran su furia, permitiendo que la vida en Gaeia pudiera prosperar.   El culto a Skapa-Og-Mynda era practicado por astrónomos, magos y artistas que veían en ella la fuente de inspiración y conocimiento para comprender y moldear la realidad. Los templos dedicados a ella eran observatorios desde donde se estudiaban las estrellas y los secretos del cosmos. Los rituales incluían la contemplación de constelaciones y la meditación sobre formas geométricas perfectas, buscando alinearse con la armonía del universo.   Tras el Ocaso de los Dioses, Skapa-Og-Mynda encontró un nuevo rol como diosa guardiana y protectora de los viajes espaciales. A raíz de la incursión de Neberor en su puerto espacial, los viajeros comenzaron a rezarle por viajes seguros. Así, se convirtió en una figura similar a una diosa del mar para los corsarios cosmicos. Los exploradores y comerciantes espaciales de Neberor, y otros puertos espaciales, confían en su guía y protección durante sus travesías por el cosmos.   Skapa-Og-Mynda enseña la importancia de comprender y respetar el espacio y las formas. Sus seguidores aprendieron a ver más allá de lo obvio, buscando la perfección y la armonía en todas las cosas. Su legado perdura en los cielos estrellados y en la geometría sagrada que aún inspira a los magos y artistas de Meket y Tír nan Ryu. Aunque su nombre ha sido olvidado, la "Diosa de las Estrellas" sigue siendo una figura reverenciada en las prácticas ocultas y en la observación astronómica.   Su influencia, aunque difícil de percibir, sigue presente en la belleza del cielo nocturno y en la perfección geométrica de las creaciones humanas. A través de sus enseñanzas y su control sobre el cosmos, Skapa-Og-Mynda continúa moldeando el destino de Gaeia, recordando a todos que el espacio y la forma son las piedras angulares del universo.   Aunque su nombre ha sido olvidado, la influencia de Skapa-Og-Mynda sigue siendo fuerte entre los viajeros espaciales y exploradores. Su culto, aunque pequeño, es fervoroso, y aquellos que se aventuran en el espacio profundo le rinden homenaje, agradeciendo su protección y guía. Las historias de viajeros que han visto visiones de su figura cambiante en las estrellas han reforzado su papel como guardiana del espacio, asegurando que su legado perdure en cada viaje seguro y cada constelación observada.