Sesión 2

Tras la llegada a la catedral de Ijun, algunos miembros del grupo deciden celebrar la llegada. Así Joseph y Etiven pasaron una noche de juerga en la cual entre otras cosas, Etiven acepto un reto culinario, que no supero (era físicamente imposible), despertó en un charco de su propia sangre con una conmoción grave que Zack sanó (TY Zack), mientras Joseph con un saco de dinero (345 gp) y una nota de agradecimiento.
  En la mañana escucharon historias sobre lo que habían hecho y gracias a Lor Laenthar resolvieron algunas dudas sobre los acontecimientos de la noche: Joseph triunfo con una elfa, Etiven se baño en un barril de cerveza, fracaso estrepitosamente al ligar con una gnoma, creo la Big Dick Roulette (suena más grave de lo que es), se hizo amigo de Alwyn y por ultimo se cayo de una altura equivalente a un primer piso de cabeza.
  Mientras desayunaban y escuchaban sobre la noche, un hombre alto, bien vestido da un aviso a la taberna de que Kethra Dalton, miembro del Perlado, esta buscando guardaespaldas (5 en concreto). Todo aventurero y aventurera de la taberna se apresuro a marcharse para conseguir el puesto de trabajo de una de las personas más ricas que se conoce, incluido el grupo que fue corriendo a sus habitaciones a recoger sus cosas, excepto Zack que ya lo tenía todo listo para proseguir la marcha y aprovecho la ventaja para comprar dos caballos. Mientras esto ocurría Joseph tuvo la mala suerte de toparse con otro buscador de empleo, que le encerró en su cuarto. Joseph, apresuradamente bajo por una cuerda a una habitacion inferior entrando, por la ventana. Para cuando Etiven y Hadvar descubrieron al sujeto atrancando la puerta y le hicieron marcharse, Joseph ya se había ido.
  En la proximidad a la catedral se desarrollo una carrera a la ciudad de Eleyford; Hadvar oscureció un cruce para perder a la competencia, Joseph trato de tirar a un caballero de su caballo, cosa que solo enfurecio al susodicho que empezo a atacarle, pero Etiven evito que fuese a más disparando a una de las patas del caballo. En el camino se hallaron en medio de una gran tormenta, la mayor que seguramente hubiesen visto.
  Llegaron prestos a Berxley, donde cogieron todas las habitaciones de la única posada, obligando a muchos a dormir en la calle. Se despertaron pronto, cogieron su desayuno, compraron un vagón a Ernest y se marcharon. En el camino la tormenta continuo, aún más fuerte que antes, obligandoles a refugiarse en una casa abandonada en una colina. Alas! Allí llego el grupo del caballero al que en la catedral habían atacado, que se la devolvió al grupo. En la pelea un rayo cayo sobre la casa, incendiando los cimientos de madera y tirandola por la colina, no sin que ambos bandos salieran pitando de la misma. Exaustos, ambas partes decidieron lanzarse una vez más al camino, ignorando la lluvia.