La guarida de los slaadi, parte 1

La aventura pasada dos gigantes destruyeron la cabaña de Argwen y los mataron (estaban en una cueva), y antes los atacaron unos lobos. Había huellas de un humanoide.   Hay un bardo llamado Naro muy carismático que se acapara a las mujeres del feudo.   El 15 de Friogar de 2542 hacemos una fiesta de cumpleaños en honor a Leannan, Sharion, Darwin, Willow, Makaki, Justin y Argwen. Organizamos una fiesta de máscaras. Ponemos un cartel en las tabernas pidiendo gente para animar fiestas, con la idea de atraer al bardo. Vino un grupo de teatro, una pareja, el flautista de Hamelin y el bardo Naro.   Al día siguiente desaparece una mujer durante la noche, y al investigar nos enteramos de que hay un portal en el bosque para el cual necesitamos un objeto o palabra para entrar. Las pesquisas con el marido de la mujer desaparecida revelan que lo único que se llevó es un anillo que había comprado recientemente en la feria. Fuimos a ver a Jason, el feriante que había vendido el anillo, y nos dijo que se los había vendido un hombre (ese y otros similares). Nos dio la lista de compradoras y fuimos a verlas. Dos de ellas habían desaparecido. Del zapatero y del panadero logramos obtener dos anillos.   Nos preparamos y fuimos hacia el portal: Gwynne, Argwen, Xiomara, Darwin, Justin, y Eslast, que nos sigue de más lejos. Poniéndonos los anillos pasamos a través del portal y llegamos a un lugar montañoso con un valle y un caminito. Por las investigaciones de Argwen, parece que estamos en las montañas más al sur de los feudos. Seguimos por el camino y llegamos a un desfiladero por el que va el camino, y más adelante el camino se ensancha y en la pared izquierda hay una entrada con arcos con runas de retención. Según Justin, hay un aura maligna que emana del lugar. Entramos.   Al final del pasillo hay una gran habitación con runas, arcos y diseños circulares tallados. Al fondo hay dos nichos con arcos similares a los de afuera en cada entrada. En los nichos hay una sustancia babosa gelatinosa abundante, que es la misma que cubre el piso del pasillo. Exploramos los pasillos y encontramos en una de las habitaciones a la criatura babosa, que tiene garras feas y el tamaño de un ogro, pero parece un sapo humanoide. La criatura huyó, fundiéndose con la pared. Seguimos explorando y un cuarto encontramos un pozo circular y una escalera que baja unos seis metros. Hay mucha baba en el pozo.