Tácticas de Guerra Nigromántica

La guerra nigromántica es una forma de combate que fue utilizada por el Culto del Heraldo de la Hecatombe, las Legiones de Emroma y la Iglesia del Sol Negro durante la Guerra de las Cadenas y luego por la República del Sol Negro en sus diferentes conflictos. Esta forma de guerra incluye el uso de muertos vivientes y de heraldos nigrománticos de la fe eranorista que puedan invocar peste y enfermedad sobre los soldados enemigos para causar desorden y reducir la moral.  

Muerte en Masa

La muerte en masa es una táctica nigromántica bastante común, la cual hace alusión a las nuevas formas de fabricación de productos en masa ya que esta involucra la invocación de numerosos muertos vivientes a la vez incluso antes de cumplir el día de haber completado el ritual de resurrección impura común. No todos los nigromantes alcanzan el poder suficiente para utilizar esta habilidad, pero quienes lo hacen son capaces de alzar a una enorme cantidad de cadáveres por un corto lapso de tiempo (no más de una hora) y utilizarlos para acabar con todo lo que se encuentre con vida de forma indiscriminada. Estas tácticas se suelen usar como una forma de combate preliminar antes de que las tropas sean desplegadas al campo de batalla, ya que, si se hace durante una batalla entre ambas fuerzas, los soldados aliados podrían ser comprometidos también.  

Marca de la Desesperanza

Esta táctica nigromántica consiste en diseminar los microorganismos que causan la muerte en vida sobre un grupo de víctimas en el campo de batalla. Eventualmente los primeros síntomas aparecerán, haciendo que las personas afectadas sean incapaces de luchar y que, al morir, se vuelvan muertos vivientes. Su propio ejército deberá recurrir a matar a sus propias tropas antes de que lleguen a ese punto o sino tendrán que enfrentarse a una nueva oleada de cadáveres andantes con sus mismos uniformes.  

Muertos Suicidas

La tercera forma de táctica nigromántica más común en Enám es la de utilizar muertos vivientes que lleven consigo armas que causen daño en área directamente al frente enemigo. Una vez estos muertos vivientes estén lo suficientemente cerca de sus víctimas, los explosivos que lleven consigo son estallados, de tal forma que todo lo que esté cerca de ellos (incluyendo a ellos mismos) sea reducidos a añicos. En vez de llevar bombas, estos "muertos suicidas" podrían llevar también armas químicas para no solo debilitar a las fuerzas, sino transformarlas directamente en muertos vivientes una vez las bacterias espirituales terminen de consumirlos por dentro.  

Combinación de armas químicas con infantería muerto viviente

Puesto que los muertos vivientes son en sí inmunes a los daños "patológicos", una forma común de táctica nigromántica es la de ahogar a los enemigos en toda clase de gases constantemente mientras que son atacados por infantería no-muerta. De esta forma, el nigromante causa daño doble sin comprometer a sus tropas ya que estas son inmunes a los efectos negativos de las armas químicas. Un ejemplo podría ser ahogar una fortaleza en nubes de gases tóxicos para luego asediarla con muertos vivientes, los cuales entran en contacto con las fuerzas enemigas dentro del área afectada por los químicos sin verse ellos mismos impactados por tales nubes.