Nobleza Vampírica en Helhyn

La clase dominante de Helhyn es la infame nobleza vampírica. Esta aristocracia de chupasangres se divide en dos categorías:

• Nobleza inmortal: Son los tres Señores Vampiros originales, también conocidos como los Patriarcas Vampíricos. Ellos son: Matsälach, Lemech y Henok. Desde la fecundación de la triarquía helhina en los primeros años del gobierno de Merég Igíran en la Sacra Enám, los mismos tres señores vampiros han mantenido su influencia y títulos reales gracias a su gran poder y su inmortalidad. Los Señores Vampiros están al mismo nivel de Adrïhn, quien, durante más de dos siglos terenarios, gobernó aquellas regiones antes de morir bajo la mano de Ternlot Igíran. Cada patriarca domina sobre uno de los tres reinos que conforman la Triarquía. La pequeña nobleza, a su vez, fue creada para dominar las regiones administrativas más pequeñas en nombre de ellos.
• Pequeña nobleza: También conocida como la mugre vampírica de Helhyn fuera de los territorios de la triarquía. La pequeña nobleza compone a los descendientes de los harems de los tres Señores Abismales: Matsälach, Lemech y Henok. Estos mestizos humano-vampiro no recibieron el don de la inmortalidad al nacer, pero sí otros poderes asociados con la maldición de Harlan, como la capacidad de controlar a otros física y psicológicamente a través de esotéricos rituales. Puesto que la pequeña nobleza debe reproducirse para mantenerse y esta valora su "pureza" vampírica, su origen en los tres patriarcas o Señores Vampiros, han recurrido al incesto desde sus orígenes. Desde el origen de la Triarquía hasta la actualidad, catorce generaciones endogámicas han producido vampiros con toda clase de mutaciones físicoespirituales y trastornos psicológicos. Estos vampiros, a diferencia de los originales, no mantienen su forma humana sino que mantienen un aspecto horrorífico y pesadillesco. Según su patriarca, los pequeños nobles pueden variar en cuanto a estas malformaciones producto de la endogamia.

 

Harems inmortales

Para crear vampiros leales que pudieran mantener el orden en cada baronía, condado y marca, los Patriarcas Vampíricos tuvieron harems, marcando un hito en la forma en que se conceptualizaban las formas de matrimonio aceptadas para los nobles en la región. Lemech, Matsälach y Henok tuvieron múltiples esposas a quienes forzaron en pactos con nobles abismales menores en vasallaje con Harlan para adquirir una forma de vampirismo menor y más tolerable para sus cuerpos y almas. Cada Patriarca tiene al menos diez "esposas", las cuales en el gran esquema de las cosas no son más que fábricas vivas de humanos malditos para las filas de los Señores.  

Pequeña nobleza helhina

Casa de los Matsälach

La casa de Matsälach corresponde al sur de Helhyn, donde se encontraba su antigua capital bajo el tiránico e implacable régimen de Adrïhn.   Los Matsälach tienen cabeza de murciélago y cuerpo antropomórfico, carente de vello o pelaje. Su piel es azabache y sus alas son acompañadas de un par de brazos adicionales que son más semejantes a sus extremidades humanas. De la cabeza de los Matsälach crecen múltiples pares de cuernos de diferentes longitudes y formas. En sus espaldas se hincha con el pasar de los años un vil tumor debajo de su piel que es tan duro como una roca, el cual brilla en un vivo carmesí que penetra a través de la piel que lo protege del mundo. Esta malformación cancerígena se dice que es donde la sangre de todas sus víctimas se acumula y donde una parte de las almas de todos los que han mordido están forzadas a sufrir hasta la muerte del vampiro. Mientras mayor sea la amorfa giba, más fuerte y rápido es el Matsälach. Los Matsälach más poderosos tienden a ser vistos caminando más en cuatro patas que en dos a causa de la gravedad de sus jorobas.  

Casa de los Lemech

La casa de los Lemech gobierna el noreste de Helhyn, junto al río que los separa de Enrúv.   Los Lemech son amorfos y mórbidos quimeras anfibios que pueden habitar las aguas y las tierras. Sus cuerpos han sido mutados tanto física como espiritualmente para semejarse a la bruta y violenta transmogrificación incompleta de un hombre a una lamprea de río. De la cintura hacia abajo, los Lemech son característicos por carecer de piernas. En cambio, a partir de su cintura comienza una larga cola con la que se arrastran y se mantienen erguidos, como una suerte de monstruo fecundado de la impía relación de un hombre y una serpiente. Por otro lado, sus escamas son como roca volcánica por su dureza y textura, y algunas veces por su color también. Cuando se alimentan de los vivos, las rocas brillan en rojo vivo y despiertan el durmiente poder de Harlan en sus venas. Asímismo, sus rostros suelen aparentar "normalidad" hasta que abren sus bocas, especialmente para comer. Sus redondas fauces están repletas de hileras tras hileras de afilados e irregulares colmillos, con los que atraviesan cual cuchillos en la piel y desangran los cadáveres de sus víctimas en solo segundos.  

Casa de los Henok

La casa de los Henok gobierna el noroeste de Helhyn, protegidos por la sombra de las montañas que lo separan de la fría Enskröd.   Los Henok son mucho más diversos en las formas bestiales que adoptan por las numerosas generaciones de endogamia. Estos suelen ser quiméricos adefesios compuestos de extremidades inséctidas o arácnidas. Una rama de la familia, la tetrapulmonada, tiene prosoma y opistosoma arácnido. Donde normalmente surgen los quelíceros se extiende un torso humano de a veces dos o cuatro brazos, con una cabeza que puede variar en un espectro de humano a completamente arácnido. Suelen ser ciclópeas criaturas sapientes de hasta 3 metros y medio, con la capacidad de trepar superficies y también de formar telarañas y escupir veneno. A la rama tetrapulmonada se le une una rama cadete conocida por sus variopintas y pavorosas morfologías inséctidas. Desde amorfas amalgamas de humano mezclado con gusano de polvo hasta escarabajo o díptero, las formas que este linaje toma despiertan el terror y la aprensión entre sus espectadores. Sus sobrenaturales habilidades los hacen también guerreros temibles, y durante largo tiempo han sido conocidos por su sed de sangre; por su insaciable necesidad de destruir para alimentarse de la carroña dejada por los estragos de la guerra.  

Granjas humanas

El concepto de granja humana es uno amplio para incluir cualquier lugar donde entidades sapientes (no solamente humanos per se, sino también trasgos, elfos, etc.) son criadas y alimentadas como ganado para luego ser usadas como comida, bebida o mascotas por los nobles. A medida que la pequeña nobleza vampírica crecía, mayor era la demanda de sangre, y para evitar continuar destruyendo la fuerza laboral de las monarquías los Señores Vampíricos ordenaron las creaciones de estas granjas, cuyo fin es el de producir la suficiente cantidad de personas para satisfacer las necesidades de la nobleza helhina, y sus caprichos más oscuros también. Hoy en día, debido a la gran cantidad de nobles que hay en Helhyn, la demanda de estas granjas ha crecido a un punto que aldeas completas han sido desaparecidas del mapa para erguir nuevos mataderos de hombres, mujeres y niños.